Cuando hablamos de higiene dental siempre nombramos lo mismo cepíllate los dientes, cuídate las encías, enjuágate con enjuague bucal, usa hilo dental para los restos de alimentos, y un largo etcétera. Sin embargo, nadie menciona a los labios.

Y es que una sonrisa estética, sana y cuidada no es nada detrás de unos labios estropeados. Tal y como dice el dicho: aunque la mona se vista de seda, mona se queda; pues aquí pasa igual, aunque tu sonrisa sea perfecta, si tus labios están estropeados debido a un mal cuidado, no hay nada que hacer.

Por ello, en el post de hoy, te vamos a contar todo lo que tienes que hacer para cuidar tus labios, y lo que seguramente hagas y deberías dejar de hacer.

En primer lugar, debemos diferenciar la piel de los labios de la del resto del cuerpo: esta parte de nuestro cuerpo es una de las más sensibles, cuya piel es increíblemente fina y delicada. Nada más hay que ver cuando nos mordemos sin querer, o cuando nos hacemos algún pequeño corte, cómo en seguida se nos hincha el labio como si nos hubiésemos dado el peor de los golpes. Es por ello que esta zona es increíblemente sensible y delicada y hay que dedicarle una serie de cuidados.

  • Nuestro primer consejo es hidratar los labios, para ello te recomendamos que bebas agua, mucha agua. Nuestro cuerpo se compone de agua, como todos sabemos, por ello, cuando no ingerimos la suficiente -ya sea bebiendo directamente, o en forma de alimentos tales como frutas y verduras, zumos, leche, etc- nuestra piel se apaga, incluyendo la de los labios, que adquieren un aspecto más oscuro y rugoso, perdiendo la suavidad que los caracteriza.

    Además, te recomendamos también el uso de bálsamos labiales, que ayudaran a proteger y mantener hidratados tus labios en épocas de frío o calor seco, en las que esta parte tan sensible de nuestro cuerpo sufre más de lo normal.

  • ¡Fuera malos hábitos! Fumar o morderse los labios por nerviosismo -esto último lo hemos hecho todos alguna vez- solo perjudica la salud y apariencia de nuestros labios, por lo tanto ¡deja de hacerlo!... Si quieres tener unos labios sanos y bonitos, claro. También resulta contraproducente lamerlos con la lengua cuando los notamos secos, con la esperanza de hidratarlos, ya que esto hace el efecto contrario: la capa húmeda de saliva depositada sobre los labios contribuye a deshidratarlos aún más y a dotarlos de un aspecto más seco.

  • Protector solar labial. Sí, has leído bien, existen protectores solares específicos para los labios, que los hidratan y mantienen protegidos de las agresiones solares. Por todos es sabido el daño que pueden hacer los rayos UVA y UVB a la piel. Sin embargo, en la zona labial estos daños se intensifican debido al grado de sensibilidad de esta zona. La piel de los labios es mucho más fina que la piel del resto del cuerpo, por lo que es más susceptible a quemarse y sufrir los daños que causa el sor.

Si tras seguir todos estos consejos durante un tiempo tu problema de labios secos persiste, nuestra recomendación es que visites a tu dentista de confianza o a un dermatólogo, ya que ellos analizarán tu caso con más exactitud, y te darán una solución si el problema fuese algo mayor.